Para mi amigo Raimundo,
pues sin él no habría llegado
nunca a este relato.
Un vehículo se detiene a su lado justo en el momento en que el rojo invade la esquina, trata de evitar llamar la atención de la mujer al volante, pero ella parece oler su nerviosismo clavando sus ojos en la mirada nerviosa del sujeto, y luego, en el negro y deforme bulto que cuelga de su hombro. Al cambiar la luz, el automóvil se marcha raudo por la calle solitaria, el sujeto logra salir del transe que lo mantenía paralizado y camina detrás del vehículo.
¿Cómo lograré que los niños no la extrañen? Decía al descansar bajo un árbol que lo ocultaba. Miraba sus manos enrojecidas y la sangre que se secaba en ellas -tal ves debí tenerle mas paciencia, pero sus alaridos sin razón, esa manía de meterse en todo, su incesante cacarear me estaban enfermando –un perro se acerca a olfatear el bulto que yace en el suelo- sé que no debí ser tan agresivo, después de todo me acompaño durante toda mi vida, -un vehículo rompe el silencio en la otra cuadra- la conocía desde niño -recoge su carga otra ves- al diablo lo que piensen los niños, esto lo hice por mi -se pone en marcha.
Realmente era una pesada carga.
Cuando di el primer golpe y escuché ese grito de dolor solo pude enfurecerme mas aún, no debí dejar que la niña lo presenciara, se que costará mucho mantenerla callada, cuando vea que no regreso con ella “de una sola pieza”, como suele decirse, comenzará a hacer preguntas y buscará la manera de decir lo que ocurrió a todo el mundo, tengo que hacerla entender que así será mejor para todos.
A la mañana siguiente una fina capa de hielo cubría al bulto amontonado entre cajas de cartón y material de embalaje, nadie parecía percatarse de él. En su cama, dormía inquietamente un sujeto con pedazos de plástico y vidrio incrustados en sus manos, mientras en el comedor, una niña lloraba lastimosamente y en silencio frente al espacio vacío donde hasta la noche anterior, estuvo ubicado el televisor.
Igual me cagué de la risa.
ResponderEliminarLo tuve que leer dos veces.
No sé, es un dramón que termina en un gran chiste. Todos los papis deberían hacer eso un día.
Te acuerdas de esa canción de 31 minutos en que el wn canta que su papá era un loco que vendía tele?
Deberíamos hacer una campaña que se llame "Apaga la tele". Un día ví eso y me gustó.
LLEGARON A TIEMPO
ResponderEliminarme gusta pensar en escritores como James Joyce
Hemingway, Ambrose Bierce, Faulkner, Sherwood
Anderson, Jeffers, D. H. Lawrence, A. Huxley,
John Fante, Gorki, Turgenev, Dostoievsky, Saroyan,
Villon, incluso Sinclair Lewis, y Hamsun, incluso T. S.
Elliot y Auden, William Carlos Williams y
Stephen Spender y el valiente de Ezra Pound.
me enseñaron tantas cosas que mis padres
nunca me enseñaron, y
también me gusta pensar en Carson McCullers
con su Café Triste y Ojo dorado.
ella me enseñó muchas cosas que mis padres
nunca supieron.
me gustaba leer los libros de tapa dura de las bibliotecas
en su simple encuadernación de biblioteca
azul y verde y marrón y rojo claro
me gustaban los viejos bibliotecarios (varones y mujeres)
que te miraban seriamente
si tosías o te reías muy fuerte,
y aún cuando se parecían a mis padres
en realidad no había ninguna similitud.
ahora ya no leo a estos autores que alguna vez leí
con tanto placer,
pero es bueno pensar en ellos,
y también me
gusta mirar las fotografías de Hart Crane y
Caresse Crosby en Chantilly, 1929
o las fotos de D. H. Lawrence y Frieda
asoleándose en Le Moulin, 1928.
Me gusta ver a André Malraux en su traje de aviador
con un gatito en el pecho y
me gustan las fotos de Artaud en el loquero
Picasso en la playa con sus fuertes piernas
y su cabeza pelada, y también está
D. H. Lawrence ordeñando esa vaca
y Aldous en Saltwood Castle, Kent, Agosto de
1963.
Me gusta pensar en toda esta gente
que me enseñaron tantas cosas que yo
nunca había imaginado antes.
y me enseñaron bien,
muy bien
cuando eso era tan necesario
me mostraron tantas cosas
que nunca creí que fueran posibles.
todos esos amigos
bien adentro de mi sangre
quienes
cuando no había ninguna oportunidad
me dieron una
Perdòn por no postearte, pero me pareciò que deberìas leer este poema de Bukowski.
ResponderEliminarme gusta pensar ke he dejado de lado a todos los ke he admirado para volar solo
ResponderEliminary me gusta pensar ke, excepto por ambroice bierce, no koincido en los gustos de bukowsky
XD
lindo poema, pero mucha forma para mi... o kisas sea ke el fondo no me atañe pk no he puesto a pensar nunka en eskritores, sinó en personas.
te kero biqui
Muuuy weno este relato wn, terrible sorpresivo el final, te desarma la wea, cuando lo vay leyendo te da una sensacion mas cuatik q la xuxa y cuanno kxay el final... la raja XD
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